TIPOS DE ZAPATILLAS DE CICLISMO Y PROBLEMAS DEL MAL USO DE
LAS MISMAS.
¿Cuales zapatillas de ciclismo debo comprar?
La primera respuesta es fácil, hay zapatillas específicas
para cada disciplina, desde la bicicleta de montaña, pasando por las de
carretera, pista o spinning, últimamente tan de moda en los gimnasio por las
enormes ventajas que tiene la práctica en el interior.
Incluso hay zapatillas que están específicamente diseñadas
para mantener los pies calientes en invierno mediante un afelpado especial,
como es el caso de las destinadas al mtb extremo en condiciones de gran frío. Todos
los principales fabricantes de zapatillas tienen una completísima gama que
cubre perfectamente las necesidades tanto para damas como para caballeros.
Hay que prestar especial atención a la comodidad del pie en
el interior del calzado. Hay que tener en cuenta que cualquier pequeña
incomodidad al calzarnos en una prueba en la tienda, se va a ver multiplicada
con el paso del tiempo sobre la bicicleta.
Lo que en un principio podría ser una pequeña molestia se
puede convertir en toda una tortura insufrible.
El pie puede dormirse, sentir pinchazos en la zona
metatarsiana, e incluso producirse ampollas por las rozaduras.
No podemos olvidar que los pies suelen hincharse un poco con
el pedaleo, fruto de una mayor irrigación sanguínea de esa zona.
- Lo primero es encontrar la talla adecuada, es preferible siempre un número más grande que no
uno menor para el ciclismo, al igual que para el patinaje, unos
centímetros extra no son obstáculo para que la extremidad pueda funcionar sin
darnos problemas de comodidad o rendimiento.
- En segundo siempre se debe buscar la comodidad. Tienen que
encajar bien y el sistema de fijación debe mantener los pies en el zapato de
forma segura y sin constricción que puede producir adormecimiento la zona final
de la extremidad, como los dedos o los huesos del metatarso.
Especialmente crítica resulta la zona inferior donde se
insertan las falanges de los dedos con los huesos del metatarso. Es ahí donde
se transmite toda la fuerza de la pedalada al pedal, y una de las zonas donde
solemos tener problemas de hormigueo dolor, debido a una irrigación deficiente
o a roces molestos.
La zona de los dedos debe darle espacio y alrededor del
tobillo debe ser cómodo. Comprobar que el talón apoya bien y se sostiene sin
movimiento. Si el talón se mueve dentro del zapato puede causar molestias y
producir una lesión en la cadera o rodilla.
Consigue lo mejor que puedas pagar, pero asegúrate de que te
sientas cómodos.
No siempre lo más caro es lo más adecuado. El hecho de
comprar una zapatillas con suela de carbono y de un peso ínfimo no te asegura
la tan importante comodidad en el pedaleo y a la postre un buen rendimiento.
Tipos de zapatillas según la modalidad ciclista.
1.
Zapatillas para carretera: Suelen tener una suela totalmente rígida y un tipo de cala
muy voluminosa, aunque ésto último depende del modelo de cala/pedal que usemos.
Es prácticamente imposible caminar con ellas. Están
concebidas para una máxima eficiencia y comodidad para el pedaleo en la
bicicleta de ruta, sacrificando la capacidad de caminar.
Unas buenas zapatillas para ruta deben tener un buen sistema
de ventilación, el cual debemos de tapar en invierno con el uso de unos
cubrebotines que pueden estar hechos de materiales aislantes como el neopreno
entre otros.
2.
2. Zapatillas de montaña “mtb”.Tienen una cala que
se en cuenta embutida en la suela, lo que las hace más adecuadas para caminar
que las de carretera. Sin embargo no compres unas pensando en salir a pasear
caminando. No están pensadas para ello sin embargo hay algunos modelos que son relativamente
flexibles y llevan unos tacos que facilitan el agarre en caso que tengamos que
bajar de la bicicleta en un tramo complicado.
Yo personalmente uso zapatillas y pedales de montaña en mi
bicicleta de carretera. Tengo también unos pedales y zapatillas de ruta, pero
prefiero los primeros para cuando hago paradas y necesito caminar. A mí personalmente
me funciona muy bien. Son un excelente equilibrio entre comodidad de pedaleo y
comodidad para caminar pequeños trayectos.
Todos los grandes fabricantes tienen una gama de zapatillas
para invierno o bien para zonas de frío extremo, con el interior más acolchado
y abrigado que las normales de entretiempo. Suelen tener un uso más bien para
modalidades extremas del mtb.
3. 3. Zapatillas para triathlon. Básicamente son unas
zapatillas de carretera con un sistema cierre extremadamente rápido. Cuando el triathleta hace la primera transición, las
zapatillas están unidas al pedal, tal como ocurre a la hora de quitarlas en la
segunda.
Al contrario que en el ciclismo convencional, la zapatillas
siempre permanece fija al pedal, y es el pie del atleta el que entra y sale de
las zapatillas sin mover para nada la cala. El sistema de fijación suele ser
mediante Velcro®.
4.
4. Zapatillas de ciclismo indoor o spinning. El ciclismo indoor es el deporte de moda en los gimnasios.
El calzado para esta modalidad son las más flexibles de
todas, ya que normalmente se suelen usar para caminar y también para practicar
otro tipo de ejercicio físico, como aerobic, pilates, etc.
Una sesión de spinning suele durar de media unos cuarenta y
cinco minutos, razón por la que la rigidez y la especificidad no son tan
importantes como es el caso de una zapatillas de suela rígida. Esta características las hace el tipo de zapatillas más
versátiles que existe.Problemas en las zapatillas de ciclismo. Dolor y
adormecimiento en los pies.Hace unos años tuve un problema en relación a mis
pies y las zapatillas de ciclismo. Por razones personales dejé de practicar mi
deporte favorito durante bastantes años.
Gané bastante peso y varios años más tarde intenté calzarme
las mismas zapatillas que había estado usando siempre (tenía unas de carretera
y otras de montaña).
Me resultó imposible de llevarlas por más de treinta
minutos.
Se me habían quedado pequeñas y no entendía la razón porque
el problema es que se me habían quedado cortas y estrechas.
Me compré un par nuevo para la ruta de mi nueva horma, pero
entonces empecé a a sentir problemas de adormecimiento de la punta del pie y en
la zona externa del mismo.
Las nuevas zapatillas me están perfectas de tamaño, pero el
adormecimiento era una tortura que intentaba corregir aflojando las fijaciones
de Velcro©.
No obtuve resultado hasta que leí algo sobre el ángulo de
varo.
Fui a que me tomaran la forma de la huella de mis pies y me
compré unas plantillas de ciclismo de acuerdo a esas medidas.
El ángulo de varo es aquel que forma el plano del pedal con
la planta del pié.
Normalmente la persona promedio suele apoyas más la parte
externa del pie que la interna, lo cual sobrecarga más esa zona y suele ser
fuente de problemas en forma de dolor y adormecimientos.
Esta especie de defecto es debida a que nuestras
extremidades están pensadas para caminar y no para pedalear.
Unas cuñas debajo de la plantilla corrigieron el problema y
nunca más he vuelto a tener problemas de adormecimiento en los pies ni otras
molestias ocasionadas por el calzado.
Hay un pequeño grupo de ciclistas en los que el ángulo de
varo es negativo, razón por la que hay cuñas de apoyo negativo para corregir el
nuevo ángulo del pie sobre el plano de las zapatillas de ciclismo.
Ajustar y poner calas en zapatillas bicicleta
Una tarea que no se realiza con frecuencia pero que es muy
importante es colocar y ajustar las calas de las zapatillas para la bicicleta
de montaña (btt mtb) en la posición correcta. La posición correcta de las calas
en las zapatillas de la btt es muy importante para no sufrir lesiones de
rodilla. Usando una regla que situándola en la suela, trazaremos una línea que
divida la suela en dos partes pasando por el centro. Esta línea imaginaria nos
define un buen punto de partida para colocar las calas.
Pueden existir tres posibles posiciones que a simple vista
observaremos como:
• Recta o
paralela a la Bici
• Tacón
hacia fuera
• Tacón
hacia dentro
Sin embargo, solo hay una posición correcta para instalar
las calas en las zapatillas que es Talón ligeramente hacia dentro y punta hacia
fuera asemejando al andar de los patos. Para comprobar que nuestra anatomía así
lo requiere, solo tienes que hacer un sencillo ejercicio: Cierra los ojos, de
pie, levanta un rodilla y deja relajado el pie, al llegar a los 90º abre los
ojos y verás la punta del pié hacia fuera, esa es la forma natural de nuestro
pie. Para lograrlo deberás girar la punta de la cala ligeramente hacia el
interior de la zapatilla. Aprietas los tornillos y te montas en la bici. Si te
has pasado girando la cala, el talón tocará la vaina trasera de la bici y
deberás corregirla ligeramente. Lo ideal es que quede un centímetro entre la
zapatilla y la vaina.
La colocación en el
eje (adelante atrás) de la cala en la zapatilla debe hacer coincidir el eje del
pedal y la articulación metatarso - falángica del primer dedo, o dicho de forma
llana: hacer que coincida el eje del pedal con el "juanete" del dedo
gordo del pie. Así, tu colocas las calas, te pones las zapatillas y te montas
en la bici, y un compañero deberá apretarte el juanete para comprobar que
debajo está el eje del pedal, y si no es así, deberás adelantarla o retrasarla
hasta que coincidan. Bien, ahora ya sabes la altura a la que tienes que poner
la cala y la mides: distancia punta de la zapatilla a - la punta de la cala;
distancia tacón de la zapatilla - parte posterior de la cala. Y como siempre se
dice que una imagen ilustra mas que cien palabras, aquí tenemos una imagen que
ilustra el ajuste de la posición delante - atrás correcta. En las primeras
salidas debes observar que no tienes molestias en las rodillas. Siempre podrás
corregir la posición hasta conseguir comodidad.
Por supuesto que una mala colocación de las calas te dará
una transmisión de las fuerzas desviada lo que podrá hacer que la rótula se
salga de su "carril" de traslado a través del hueso fémur y acabar
lesionándose, lo más habitual en forma de "Condromalacia Rotuliana",
pero también puede derivar en lesiones de los tendones como las famosas
tendinitis.